En su manifiesto el movimiento 15 M (Indignados en Madrid), expresan lo siguiente "Existen unos derechos básicos que deberían estar cubiertos en estas sociedades: derecho a la vivienda, al trabajo, a la cultura, a la salud, a la educación, a la participación política, al libre desarrollo personal, y derecho al consumo de los bienes necesarios para una vida sana y feliz.
Es necesaria una Revolución Ética. Hemos puesto el dinero por encima del Ser Humano y tenemos que ponerlo a nuestro servicio. Somos personas, no productos del mercado. No soy sólo lo que compro, por qué lo compro y a quién se lo compro. Por todo lo anterior, estoy indignado. Creo que puedo cambiarlo. Creo que puedo ayudar. Sé que unidos podemos.
Las exigencias de los indignados se leen así: “No es una crisis es el sistema”, “Sin casa, sin pensión, sin miedo”, “No hay pan para tanto chorizo” y “Por una educación gratuita y pública”, las consignas hablan de un dilema que monetaristas y gente que quiere un mejor presente tratan de resolver.
En el medio de todas estas exigencias estamos los indignados. Usted y yo, y todos los que pensamos que tendríamos una pensión, un sistema de seguridad social, un futuro con educación accesible, esperanza… y que ahora lo dudamos.
El mundo entero esta indignado.
Sal con nosotros. Es tu derecho." Con estas y otras consignas, el Movimiento de los Indignados en el mundo cobra cada día mayor fuerza y son cada vez más los adeptos que se ponen al servicio del mismo con sus capacidades y talentos en la búsqueda de una sociedad más justa, es por ello que todo el que crea y sienta que esta sociedad (humanidad) necesita un cambio, es el momento de alzar la voz y reclamar para que sea posible el surgimiento de la Civilización del Amor con la que tantos jóvenes soñamos.
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